Hace mucho tiempo que el uso popular de los psicofármacos está a la orden del día. Muchas personas piensan, desde la incultura que existe acerca de sus indicaciones y sus efectos, que tomándose de manera indiscriminada un ansiolítico o un antidepresivo cuando se sienten mal, un día de vez en cuando, o de manera constante pero sin orden ni dosificación, van realmente a solucionar lo que les está pasando.
Gran error. Lo único que están haciendo es poner un parche que sólo va a enmascarar el daño real, y que, probablemente, lo va a agudizar en algunos aspectos.
La única solución válida si te sientes mal cada día a nivel emocional, es consultar con un psicólogo para evaluar juntos tu caso, y determinar qué tipo de tratamiento es el más adecuado para tí,
En muchos de los casos la medicación no es necesaria, sólo con una adecuada intervención psicoterapeútica te sentirás bien de manera estable. En ocasiones podremos indicar un sostenimiento en una fase más aguda como apoyo al trabajo psicológico, o si estuviéramos ante un diagnóstico más severo, de tipo estructural.
En cualquiera de los casos, actuaríamos ya en colaboración con nuestro médico psiquiatra, para que esa medicación fuera indicada y supervisada de manera específica para tí. Con toda la tranquilidad en el cuidado de tu salud, a todos los niveles.
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