Desde un enfoque integrador, contemplando todo lo que de base nos construye, y de la misma manera y con el mismo poder, puede destruirnos. Así garantizamos una comprensión global del origen del problema, y una atención individualizada para conseguir por medio de técnicas adecuadas una mejora de la sintomatología y una estabilidad a medio-largo plazo.

Incorporando todo lo que aporta el campo de las neurociencias (neurobiología interpersonal, apego, epigenética, sistémica familiar, EMDR), tan esenciales a la hora de establecer una mayor comprensión y una cura más estable y definitiva.

Cada problema afecta de manera distinta a cada persona, y según la estructura de personalidad y la experiencia de vida, tiene efectos diferentes y provoca que cada cual lo sienta de de diferente manera. Esto es lo que tenemos en cuenta de manera prioritaria.

Por ello es necesaria siempre como base de partida una evaluación  exhaustiva, así como una preparación y establecimiento de objetivos, para conseguir elaborar primero y luego aplicar un diseño de tratamiento personalizado que asegure la mejora en la calidad de vida psicológica de la persona desde el primer día de consulta.

Te ayudamos  a que identifiques y comprendas qué te está pasando y por qué, y así es  cómo aprendes a manejar, controlar y mejorar todo aquello que te está haciendo sentirte mal, desconcertado e inseguro.

Siempre con una actitud cercana y empática, y con toda la profesionalidad, estableciendo un entorno seguro, de confianza y vínculo de compromiso por ambas partes.

Con rigurosidad, pero de manera flexible y adaptada a lo que necesitas.

Demostrándote desde el primer día que tú eres lo que importa.